Caos y abandono en hospitales del IMSS de Chihuahua: Gobernadora panista María Eugenia Campos deja morir a pacientes por falta de especialistas y medicamentos
El PAN hunde la salud en Chihuahua: hospitales del IMSS sin médicos ni medicinas, y pacientes al borde de la muerte. La indolencia blanquiazul cobra vidas.


En el estado de Chihuahua, la crisis sanitaria es cada vez más alarmante y pone en riesgo la vida de cientos de derechohabientes del IMSS, víctimas de la negligencia y el abandono del gobierno panista encabezado por la gobernadora María Eugenia Campos Galván. La grave escasez de especialistas, insumos médicos y medicamentos en los hospitales públicos refleja la total incapacidad de esta administración para garantizar servicios básicos de salud.
Martín Aguilar Perón, un paciente de Chihuahua que lucha por su vida, denunció el infierno que ha vivido para recibir atención médica en el IMSS. A pesar de contar con un amparo judicial que ordena su atención inmediata por un problema grave en la columna que requiere cirugía urgente, el IMSS en Chihuahua ha ignorado la orden, dejando a Aguilar y a más de 50 pacientes en una lista de espera que podría costarles la vida.
La falta de especialistas en Ortopedia y Traumatología, junto con la carencia de insumos esenciales, convierte a los hospitales de Chihuahua en verdaderos cementerios silenciosos donde la indiferencia de la gobernadora María Eugenia Campos se cobra vidas día a día. Ni las órdenes judiciales ni las constantes denuncias logran mover a esta administración panista que prefiere mirar hacia otro lado mientras los chihuahuenses sufren.
Este desmantelamiento del sistema de salud público en Chihuahua es un reflejo claro del fracaso del PAN en el estado, que en lugar de atender las necesidades urgentes de la población, mantiene a los hospitales en condiciones deplorables, condenando a los pacientes a esperar en vano por tratamientos que podrían salvarlos.
La crisis en el IMSS de Chihuahua es un escándalo que exhibe la incapacidad y falta de compromiso de la gobernadora María Eugenia Campos, quien debe asumir su responsabilidad y tomar medidas inmediatas para revertir esta tragedia sanitaria que amenaza la vida de miles de chihuahuenses.
Chihuahua exige respuestas y acciones reales, porque bajo el mandato panista la salud pública en el estado se ha convertido en un lujo que pocos pueden permitirse.