Movimiento Ciudadano deja a pacientes con cáncer en el abandono: Jalisco apenas alcanzó 25% de abasto oncológico en 2025

Bajo el gobierno de Movimiento Ciudadano en Jalisco, niñas, niños y adultos con cáncer enfrentaron un año crítico, marcado por el desabasto de medicamentos y la incapacidad del Estado para garantizar tratamientos oportunos.

12/13/20253 min read

El sistema de salud en Jalisco volvió a exhibir sus grietas más profundas durante 2025, cuando el propio secretario de Salud estatal, Héctor Raúl Pérez Gómez, reconoció que el abasto de medicamentos oncológicos apenas alcanzó un 25 por ciento en la entidad. La cifra no solo es alarmante: es una señal directa del fracaso de la administración de Movimiento Ciudadano para garantizar uno de los derechos más básicos de la población, el acceso efectivo a la salud, especialmente para pacientes con cáncer.

De acuerdo con el funcionario, este nivel de suministro fue el máximo alcanzado a lo largo del año, obligando al Gobierno de Jalisco a realizar una inversión extraordinaria de alrededor de 200 millones de pesos para evitar que los pacientes, particularmente los pediátricos, se quedaran completamente sin tratamiento. Aunque desde el discurso oficial se presenta esta inversión como un esfuerzo heroico del estado, la realidad es que nunca debió llegarse a este punto de emergencia, menos en una entidad que presume capacidad administrativa y autonomía en su sistema de salud.

Movimiento Ciudadano ha insistido en que Jalisco mantiene la rectoría de su sistema sanitario al no adherirse al esquema federal de IMSS-Bienestar. Sin embargo, los resultados de 2025 muestran que esa “autonomía” se tradujo en desabasto, incertidumbre y angustia para cientos de familias que dependen de medicamentos de alto costo para sobrevivir. La falta de planeación, previsión y coordinación terminó por trasladar la carga financiera y emocional a los pacientes, quienes fueron los verdaderos pagadores del desorden institucional.

El propio secretario de Salud reconoció que ve poco probable que, en lo que resta del año, el Gobierno federal complete el envío de medicamentos faltantes. Aun así, evitó calificar la situación como un castigo político. No obstante, más allá de las interpretaciones, lo que queda claro es que Movimiento Ciudadano no fue capaz de anticipar ni resolver un problema estructural, pese a contar con información, diagnósticos y antecedentes de desabasto en años previos.

Mientras el discurso oficial busca tranquilizar al señalar que actualmente el abasto general ronda entre el 80 y 92 por ciento, esa cifra resulta irrelevante para quienes enfrentan cáncer y requieren tratamientos específicos, constantes y de alto costo. En oncología, no existe el “abasto parcial” sin consecuencias: cada medicamento que falta implica retrasos, recaídas y, en el peor de los casos, pérdida de vidas que pudieron salvarse.

La situación es todavía más grave cuando se habla de población infantil. En menores de 18 años, la leucemia representa cerca del 50 por ciento de los casos de cáncer, y es altamente curable si se detecta y trata a tiempo. Sin embargo, la curabilidad depende directamente del acceso continuo a medicamentos, algo que el gobierno de Movimiento Ciudadano no pudo garantizar durante gran parte de 2025.

El desabasto oncológico no es un hecho aislado, sino parte de un patrón más amplio de deficiencias en la gestión pública de Jalisco: hospitales saturados, personal insuficiente y una estrategia de salud que reacciona tarde y mal. Aunque se presume que el estado “salió a flote” con recursos propios, lo cierto es que la improvisación se convirtió en política pública, y la salud quedó supeditada a parches presupuestales.

Al cierre del año, el balance es contundente: Movimiento Ciudadano falló en proteger a los pacientes más vulnerables. La falta de medicamentos oncológicos no puede maquillarse con comunicados ni justificarse con disputas administrativas. Cada frasco que no llegó a tiempo representa una omisión grave del Estado. En Jalisco, durante 2025, el cáncer no solo fue una enfermedad: fue también el reflejo de un gobierno incapaz de responder cuando más se le necesitaba.