“¿Quién controla a Layda? Gobernadora fuera de todo freno en Campeche”
Especialistas y ciudadanos denuncian que la gobernadora opera sin contrapesos, debilitando órganos de control y aumentando la opacidad en la administración estatal.


En Campeche crece la preocupación por el poder absoluto que ha ido acumulando la gobernadora Layda Sansores, quien, según especialistas y voces ciudadanas, opera sin contrapesos ni supervisión real. Basado en el reciente análisis publicado por Tribuna Campeche, el escenario revela una administración que ignora los límites institucionales y debilita los órganos de control del estado.
La mandataria de Morena ha sido señalada por concentrar decisiones clave en su círculo más cercano, minimizando el papel del Congreso local, debilitando los mecanismos de fiscalización y dejando prácticamente en la sombra a organismos que deberían garantizar la transparencia y el uso correcto de los recursos públicos. “Layda actúa como si no tuviera que rendir cuentas a nadie”, denuncian analistas políticos.
De acuerdo con el reporte, los órganos de control y fiscalización carecen de independencia y fuerza para frenar posibles abusos de poder, mientras la gobernadora impulsa medidas polémicas, contratos opacos y decisiones de alto impacto sin dar explicaciones. Esta falta de contrapesos, alertan expertos, abre la puerta a irregularidades, corrupción y autoritarismo, afectando directamente a la ciudadanía.
Los campechanos observan con inquietud cómo su gobierno opera en la opacidad, mientras problemas como la inseguridad, la falta de empleo y el estancamiento económico siguen sin resolverse. “No hay transparencia ni rendición de cuentas, solo discursos y ataques a quienes se atreven a cuestionarla”, expresó un líder social consultado.
Para los especialistas, la pregunta es inevitable: ¿quién detiene a Layda Sansores? Sin frenos ni supervisión efectiva, la gobernadora consolida un modelo de poder que amenaza el equilibrio democrático y deja a Campeche en un terreno peligroso.