Sin empleo, sin oportunidades: Campeche bajo Morena, un estado sin futuro
Con Morena, Campeche enfrenta desempleo, fuga de talento y una economía estancada. Sin inversión ni rumbo, miles caen en la informalidad o migran.


El desempleo y la falta de oportunidades laborales son dos de las principales preocupaciones de los campechanos. Desde la llegada de Layda Sansores al gobierno, las promesas de generar empleo, atraer inversión y reactivar la economía local se han quedado en el olvido. Hoy, Campeche es uno de los estados con menor crecimiento económico del país.
Jóvenes recién egresados no encuentran espacios para desarrollarse. Profesionales calificados migran a otros estados en busca de mejores condiciones. Y quienes deciden quedarse enfrentan empleos mal remunerados, sin prestaciones y con pocas posibilidades de progreso. Esta crisis laboral ha empujado a miles de familias a la informalidad o al subempleo.
Además, sectores clave como la industria, el turismo y la pesca se encuentran estancados, sin una estrategia clara de reactivación. La falta de liderazgo económico en la administración estatal ha generado incertidumbre entre empresarios locales, muchos de los cuales han optado por cerrar sus negocios o trasladarlos a otras entidades.
Los programas de apoyo al empleo han sido insuficientes y, en algunos casos, inexistentes. Además, las políticas del gobierno de Morena no han logrado generar un entorno atractivo para los inversionistas, lo que ha provocado el cierre de negocios locales y la pérdida de miles de empleos.
Desde el inicio de su administración, Layda Sansores ha preferido enfocar su gestión en la confrontación política y la autopromoción, en lugar de atender los problemas reales de la economía campechana. Después del informe de gobierno, la pregunta que flota entre los ciudadanos es: ¿de qué informe se puede hablar, si no hay nada que informar?