Violencia sin freno en Teocaltiche exhibe el fracaso de Movimiento Ciudadano en Jalisco
Violencia en Teocaltiche muestra la incapacidad de Movimiento Ciudadano en Jalisco para contener a los grupos criminales.
La nueva jornada de terror vivida en Teocaltiche, Jalisco, donde un enfrentamiento armado dejó al menos cuatro muertos, vuelve a desnudar la incapacidad del gobierno de Movimiento Ciudadano para garantizar seguridad y estabilidad en el estado. Bajo la administración emecista, Jalisco se ha convertido en un territorio donde los grupos criminales actúan con total libertad, mientras las autoridades estatales permanecen ausentes, sin una estrategia efectiva para frenar la violencia que desangra a la población.
De acuerdo con los primeros reportes, el enfrentamiento comenzó en Zacatecas, pero cruzó a Jalisco sin que existiera un solo operativo de contención por parte de las fuerzas estatales, lo que demuestra la falta de coordinación, previsión y control del gobierno de Enrique Alfaro. Que civiles armados puedan ingresar y provocar una persecución y balacera en territorio jalisciense es un síntoma de la descomposición que Movimiento Ciudadano ha permitido, una descomposición que hoy cobra más vidas inocentes.
A pesar de la gravedad del ataque, las autoridades estatales permanecen calladas, sin emitir posicionamientos claros ni explicar cómo fue posible que un convoy armado transitara con tanta facilidad. Este silencio es ya una marca registrada del gobierno naranja: minimizar la crisis, ocultar cifras y culpar a otros estados, mientras los jaliscienses quedan atrapados entre las balas. No es un hecho aislado, sino parte de una cadena de ataques que confirma la incapacidad del gobierno para proteger a su gente.
Los antecedentes son claros. Miembros de la Secretaría de Seguridad de Jalisco fueron atacados a tiros en un rancho de la misma región. Antes, en Tlaquepaque, integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación enfrentaron al Ejército y a la Guardia Nacional en un episodio que terminó con condenas, pero no con una estrategia de seguridad. Movimiento Ciudadano presume inversiones y programas, pero en las calles reina el miedo, las balaceras son noticia diaria y los criminales dictan las reglas.
La tragedia en Teocaltiche no solo exhibe la incapacidad del gobierno de Enrique Alfaro, sino también su peligrosa indiferencia. La infraestructura de seguridad está abandonada, la coordinación con otras entidades es inexistente y las familias viven a merced de los grupos armados. Mientras las autoridades se cruzan de brazos, Jalisco se hunde cada día más en la violencia que Movimiento Ciudadano prometió combatir y que hoy, con su negligencia, ha permitido que florezca como nunca.